Salida 27/07/25

Después de un viernes / sábado de nieve del este, me fui hasta el campo de Nico a visitarlo (encima había guiso). Una vez allá y después de las torta fritas de Marta, ensillamos unos caballos y nos fuimos hasta el mirador de los Cóndores a ver si lo que pensamos era cierto.
¿Qué pensamos?, que si la nevada venía del este, los dormideros de la hoja iban a tener nieve y por lo tanto no iban a tener cóndores…
Al llegar al mirador, confirmamos nuestra predicción. Unos 15 cóndores, se ubicaban en «la esponja», algunos en solitario, otros acurrucados.
Como se largó a nevar de nuevo, decidimos volver por los caballos. Durante el trayecto de vuelta, empezamos a ver una serie de cóndores, en fila, encarando directo a los dormideros: 1, 2, 3… unos 25 en total pasaron.
Hubo 2 lindas situaciones para destacar:
1 – Un juvenil posado en una piedra en el campo, que evidentemente entre el cansancio y la inexperiencia tuvo que bajar… Bueno, al pasar los adultos por el lugar, un par de ellos se quedaron dando vueltas sobre él, hasta que levantó vuelo y se unió al grupo. Este tipo de actitudes se ve mucho en las liberaciones de juveniles dónde siempre aparece algún adulto por la zona.
2 – Trencito de cóndores, uno detrás del otro, y de repente el último, en lugar de continuar, decide quedarse dando vueltas. Mi teoría era que estaba esperando un grupo más retrasado y que de esa forma, y entre las nubes lo iban a poder ver de referencia para encontrar el lugar… Al ratito de esto, aparecieron 5 cóndores mas en dirección a él. Una vez que pasaron todos, se unió al grupo y se fue a los dormideros.

Claro que son interpretaciones personales, pero sino era eso, ¿qué otra cosa podría haber sido?

En total contamos alrededor de 40 cóndores que se iban a quedar ahí…

Nota importante: la vuelta la hice por «La Paloma», no recomendable porque debido a la geografía del camino y el gran afluente de vehículos, se convierte en una pista de patinaje por el hielo, generando bajadas sumamente riesgosas, tanto que cruzamos una Amarok volcada.